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Amics del Liceu pone palabras y colores a la ópera

La 29a edición del libro ‘Temporada de ópera’ cuenta con la colaboración del artista Josep Maria Riera i Aragó

29-11-2020

La ópera se puede mirar desde las palabras, desde los colores, desde los materiales y las texturas, desde las historias y las anécdotas, desde las vivencias propias, desde el conocimiento académico. Se pueden proyectar tantas miradas diferentes sobre una misma ópera que todo el mundo puede encontrar la manera de entrar en ella. Con este convencimiento, la Asociación de Amics del Liceu hace 29 años que edita el libro Temporada de ópera, una publicación anual en la que personalidades de ámbitos muy diversos aportan, desde su punto de vista personal, las claves de las óperas programadas por el Gran Teatro del Liceo.

“La idea de este libro es que los aficionados a la ópera tengan a su alcance una herramienta para poder ampliar sus conocimientos y así poder disfrutar mejor de la música”, comenta la periodista Maria Gorgues, que dirige y coordina esta publicación desde hace 7 años. El proyecto Temporada de ópera encaja perfectamente con la razón de ser de Amics del Liceu, que se fundó en 1987 con “la voluntad de apoyar la actividad del Gran Teatro del Liceo y de ser una plataforma de divulgación de la ópera y la música en general”.

La portada del libro ‘Temporada de ópera’ de este año. Fuente: Web de la Asociación Amics del Liceu.

A Temporada de ópera encontramos análisis rigurosos, hechos por musicólogos e intelectuales de prestigio internacional, pero también presentaciones más ligeras e íntimas, escritas por personalidades destacadas de diferentes ámbitos. El único denominador común de todos los colaboradores es la afición por la ópera. En esta 29ª edición participan, por ejemplo, el jugador de baloncesto Pau Gasol, la artista y escritora Irene Solà, el arquitecto y poeta Quim Español, la escritora Tracy Chevalier y el músico y escritor Gerard Quintana.

Además, el libro incorpora cada año la visión de un artista plástico, a quien se pide que elabore tres obras por cada título de ópera programado. El artista invitado de este año es el escultor y pintor Josep Maria Riera i Aragó (Barcelona, 1954). Las obras que ha creado para Temporada de ópera aparecen a lo largo del libro. Los originales estarán expuestos en el Balcón Foyer del Liceu entre el 2 de diciembre de 2020 y el 11 de enero de 2021 (inicialmente, la exposición se tenía que hacer entre el 19 de noviembre y el 30 de diciembre, pero se aplazó por culpa de la cancelación temporal de los eventos culturales, impulsada por la Generalitat para hacer frente a la segunda ola de la pandemia).

El artista Josep Maria Riera i Aragó, delante de sus obras en la presentación del libro ‘Temporada de ópera’.

Pintar la música

Josep Maria Riera y Aragón, que es sobre todo conocido por su obra escultórica, encaró este proyecto como un reto y como una oportunidad para hacer un trabajo muy diferente de todo lo que había hecho antes. Como se explica en la introducción del libro Temporada de ópera, este artista “puede ser descrito como un poeta visual, un escultor que goza igualmente al estudio de pintura o en el taller de grabado”.

Su versatilidad queda plasmada en los 36 originales —tres por cada título programado— que ha elaborado para esta ocasión. Riera y Aragón juega con los materiales y las texturas. Explora las posibilidades escondidas en los mismos soportes de las obras. Encontramos obras realizadas sobre papel, pero también sobre cartón y tela. Los papeles que emplea, a menudo tímidamente arrugados, casi nunca son blancos, sino que opta por colores amarillentos y marrones, con los bordes desteñidos o quemados. Predominan los tonos rojizos, dorados y negruzcos. Algunas obras están hechas a partir de objetos ya existentes, como el abanico floreado que Riera y Aragón presenta en relación con La traviata, de Verdi.

“Como lo que se me pidió eran tres imágenes por cada ópera, y dada la diversidad de todas ellas, decidí que para que el conjunto tuviera unidad, del título de cada ópera haría una imagen que a mí me sugiere el sentimiento general, y las otras dos imágenes serían fruto de una reflexión sobre algo subjetivo pero a la vez representativo respecto de cada obra”, según explica el artista en una entrevista publicada en la Hoja Informativa número 55 dels Amics del Liceu. El artista ha decidido exponer juntas las tres obras dedicadas a cada ópera, porque a su juicio forman parte de una misma unidad.

Pilar Páramo i Josep Riera i Aragó, delante de las obras del artista.

Riera y Aragón es un gran amante de la ópera. Antes de empezar a crear materialmente las obras plásticas, hizo un proceso profundo de investigación para abstraer los temas centrales de cada ópera y así poder plasmar a través de su arte. Durante este proceso, contó con la ayuda de Pilar Páramo, su esposa, con quien conversó largamente sobre las diversas óperas.

La ópera, un arte contemporáneo y para todo el mundo

“A través de la ópera se pueden explicar cosas muy contemporáneas. Y tiene gracia que un médico, o una científica, o una deportista, o un arquitecto puedan hablar de ellas. Buscamos perfiles variados y les damos total libertad. Nos hemos encontrado con puntos de vista insólitos”, dice Maria Gorgues.

Como toda expresión artística, la ópera nos interpela, nos habla de nosotros. Cada uno descifra una obra según su subjetividad. Y precisamente por eso resultan tan interesantes los puntos de vista de las personalidades que participan en Temporada de ópera. Por ejemplo, el conocido jugador de la NBA Pau Gasol ve en el personaje de Don Giovanni la expresión de un mito, y lo relaciona con la necesidad de poner los mitos “arriba de un pedestal”, una necesidad especialmente imperante en el mundo del deporte: “El deporte colecciona mitos igual que Don Juan colecciona amores: un día estás en el cielo, al día siguiente estás en el infierno. Muchos deportistas profesionales pasan de ganar mucho dinero a perderlo todo cuando se retiran, del éxito absoluto al fracaso más doloroso, después de dejarse llevar por tentaciones de la vida “.

La directora y dramaturga Ana R. Cosa, a quien toca hablar de La traviata, de Verdi, relaciona el caso de Violetta con el movimiento feminista actual y hace una crítica de la prostitución y del amor romántico, que lleva la protagonista del ópera a “someterse al otro hasta las últimas consecuencias, hasta la pérdida total de la voluntad”.

El cantante de Sopa de Cabra, Gerard Quintana, es el encargado de presentar Tannhäuser, de Wagner. Explica su primera experiencia en el Gran Teatro del Liceo. “No imaginaba que entrar dejaría huella en mí para siempre. Estaba a punto de descubrir Richard Wagner “, explica Quintana con un tono melancólico.

Todos ellos, y muchos otros, han accedido a compartir un pedazo de su pasión por la ópera. Nos hacen más plana y plena la entrada a las óperas programadas en el Liceo, y al mismo tiempo nos hacen un regalo sumamente valioso: nos abren las puertas de su sensibilidad.


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